18 de diciembre de 2010
Controlando las plagas de elefantes
17 de diciembre de 2010
Jean Guitton, un testigo del siglo - Parte II
-La realidad misma es paradójica. Dios es, por excelencia, el espíritu paradójico. Pero en Él es muy natural ser paradójico. Y más aún, somos nosotros los paradójicos con respecto a Él, con nuestro pensamiento hecho de antemano y si paradoja.
La defensa del cristianismo como una realidad histórica y no mítica; la idea de que la mística es el centro de toda religión, la moral y la política, son, entre otros, los temas a abordar por el escritor en sus discusiones y pláticas con cada una de los personajes convocados.
En éste, su último libro, nos invita Guitton a pensar con él y avanzar en esta "suma personal" y ser testigos del testimonio conmovedor y vivencial de las razones que lo llevaron a ser un creyente paradójico y abrazar la verdad por el hecho de que alguien, hace dos mil años logró que el amor venciera a la muerte.
Último exponente de una generación que incluye nombres como los de Jacques Maritain, Leon Bloy, Daniel-Rops, Etienne Gilson y Julian Green, el de Jean Guitton resplandece con espíritu de la época. Guitton se carteaba con Albert Camus; con su exalumno Louis Althusser, a quien asistió en su locura y en su dolor (Althusser, enloqueció y asesinó a su esposa). Jean Guitton participó como laico en el Concilio Vaticano II, al que se anticipó en sus enfoques. Defendió con celo la autonomía del pensamiento y del arte (también era pintor) y se adelantó en la interpretación hermenéutica de los textos bíblicos: "Estoy cada vez más convencido de que en los siglos futuros la relación entre teología y exégesis se invertirá: se partirá de los textos bíblicos para fundar la teología".
En una entrevista concedida en 1995, Guitton responde así de una pregunta:
-Le diré lo que pienso de los ateos. Pienso que el ateo es un hombre con una idea de Dios más pura que la de sus contemporáneos. Para mí, la figura del ateo por excelencia es la de Sócrates. Fue condenado a muerte porque tenía una idea de Dios más pura que la de los demás atenienses, sus contemporáneos que lo condenaron. Spinoza, definido como el ateo más grande de los tiempos modernos, presenta el mismo perfil.
André Malraux aseguraba que "el siglo que viene será religioso o no será" Más cauto, Jean Guitton subraya la complejidad del asunto y dice:
-Con los últimos años del milenio termina una larga época. Estamos como ciegos en un tiempo metafísico. Nadie se atreve a decirlo. Siempre silenciamos lo esencial, porque lo esencial es lo insoportable.
Jean Guitton concebía el progreso espiritual como auténtico fundamento de una vida éticamente más sana y políticamente menos injusta y en él veía la gran deuda contraída por nuestro tiempo con un concepto integrado y pleno del desarrollo humano. La profunda incomprensióndel sentido del progreso espiritual que tanto daño ha hecho, fue combatida y cuestionada por Guitton a lo largo de su lúcida y furctífera obra. Entre sus libros más conocidos están El pensamiento y la guerra; Historia y destino; Lo puro y lo impuro y Lo absurdo y el misterio.
Frente a la desorientación generalizada y la retórica del escepticismo, la obra de Jean Guitton se alza como una potente voz que propone reconocer, en el acercamiento actual entre la ciencia, la fe y la filosofía un venturoso indicio de un periodo renovador, menos indiferente al dolor y, por eso, más humano y esperanzador.
Limpiando naturalmente el medio
16 de diciembre de 2010
Jean Guitton, un testigo del siglo
"El hombre es a la vez un animal religioso y materialista. Por eso tiene tendencia a fabricar materialismos religiosos y religiones que sacralizan su materialismo. Pide y espera de Dios solo beneficios materiales. Poco a poco el hombre limita su religión a esa práctica materialista e interesada. En tiempos de guerra las iglesias están llenas, en tiempos de paz están vacías".
Jean Guitton nació en 1901 en Saint-Etienne, Francia, y murió 98 años después en París. El último gran filósofo católico se caracterizó tanto por su disposición al diálogo con distintas religiones y posiciones ideológicas como por su intento de conciliar las revelaciones de la fe con las verdades de la ciencia. Dice Bernard Shaw que "lo mejor es morir joven pero lo más tarde posible". Joven aún, tras publicar más de cincuneta libros e innumerables artículos, ensayos y entrevistas, en 1988 Guitton, un privilegiado testigo del siglo, publicó Un siécle, una vie; y todavía en 1997 vio la luz su último libro, precisamente titulado Mi testamento filosófico. "La noche en que morí pasaron cosas extrañas en mi departamento parisino. Todo comenzó cuando yo agonizaba tranquilamente. Me faltaba poco para cumplir el centenario. No sufría, casi no me angustiaba y mientras me extinguía, pensaba. Pero también esperaba". Así comienza este libro en el que Guitton narra su propia muerte. En sus momentos finales es visitado por personajes como Sócrates, Pascal, Bergson (su querido maestro), el general De Gaulle y el papa Pablo VI, en cuyos brazos muere. Con todos ellos charla, discute y se reconcilia, sosteniendo unos diálogos brillantes, apasionados, a veces hostiles y luego afectuosos. Un ángel perverso "llega a sembrar confusión en mi espíritu" y se entabla un formiidable duelo verbal. Al final del debate, el ángel y el moribundo intercambian estas palabras:
- Guitton, usted es diabólico.
-Usted es un ángel. Lucifer.
Una vez acaecida la muerte del escritor, éste asiste a su propio funeral y ahí conversa con El Greco, con quien reflexiona sobre El entierro del conde de Orgaz:
-Guitton: ¿Qué es el dibujo?
-El Greco: La derrota del tiempo, el honor del espacio
Con Pascal sostiene una discusión teológica:
-Creo en Dios por una razón fundamental: porque me cuesta creer en Él. Si Dios fuese fácil, estaría al alcance de la mano.. No sería trascendente y no sería Dios. Pero si Dios es Dios ha de haber una desproporción entre Él y nosotros. No nos extrañamos entonces de que para recibirlo tengamos que ponernos
Luego conversa con el general De Gaulle, quien le pregunta al filósofo:
-¿Qué es la cobardía?
-La cobardía, general, es buscar la aprobación y no la verdad; las condecoraciones y no el honor; el ascenso y no el servicio; el poder y no la salud.
Continua en el siguiente post...
El plástico recobra su sitio
¿Cuánto vale una computadora inútil?
Acero que contiene,, unos 25 centavos de dólar; oro y alambre que tiene el procesador, un dólar; los conectores de cobre, oro y plata de la tarjeta madre,, dos; cobre de los cables, unos 9 centavos de dólar; aluminio de los drivers, más o menos 10 centavos de dólar; aluminio y cobre de los disipadores de calor del procesador, aproximadamete 40 centavos de dólar cada uno; el hule y plástico del cinescopio que están mezclados con cobre, unos 90 centavos de dólar; monitos, 2.50 dólares; plástico exteriror y del teclado pueden reciclarse en artículos del mismo material; por su parte, los discos duros y los lectores de discos compactos pueden ser reutilizados como partes de repuesto.